El impacto oculto de tus hábitos en los “problemas” del día a día.
- MAONI OFICIAL
- 1 dic 2024
- 2 Min. de lectura
Todo empieza con un curioso mensaje que me dieron mis jeans.
Llevaba semanas quejándome de un jean que, al poco tiempo de comprarlo, se había ‘embombado’. Dejó de gustarme, así que decidí comprar otro. Al cabo de unos días, pasó exactamente lo mismo.
Mi primer pensamiento fue que la marca donde había comprado era de mala calidad. Así que me fui a por otro jean, esta vez de una marca ‘superior’. Problema resuelto, pensé… pero no.
A los pocos días, este nuevo jean se veía igual que los otros dos. Fue entonces cuando mi mente empezó a buscar respuestas más allá de la calidad: “Debe ser que no tengo secadora. Al secarse al aire libre, la tela pierde su forma”, me dije.
Al mudarnos, encontramos un lugar donde podíamos secar la ropa al sol, y noté que los jeans se encogían un poco, como si se regeneraran. Pero luego, al usarlos, volvían a dañarse. Mi mente ya estaba agotada de analizar qué podía estar pasando.
Y entonces, un día cualquiera, mientras estaba en el trabajo, sucedió algo. Miré hacia abajo, y ahí estaba: siempre me siento con las piernas cruzadas, como en posición de meditación.

Ese momento fue una revelación. No eran los jeans, ni la marca, ni la secadora que no tenía. Era yo.
Con mis hábitos, había estado dañando los jeans y culpando a todo lo externo. Buscaba tantas razones lógicas, pero la respuesta siempre estuvo justo debajo de mis ojos (y de mis piernas).
Este pequeño descubrimiento me hizo pensar en cuántas veces hacemos lo mismo en otras áreas de nuestra vida. Cuando algo no nos gusta o no sale como esperamos, buscamos razones externas para justificarlo. Pero, ¿qué pasaría si nos detuviéramos a mirar hacia adentro?
Quizás, como con mis jeans, descubriríamos que somos parte de la ecuación.
Y tú, ¿qué ‘jeans embombados’ tienes en tu vida? ¿Qué estás haciendo, tal vez sin darte cuenta, que los está cambiando?
Porque a veces, el cambio no empieza con una nueva marca o una solución externa. Empieza contigo.
✨ Reflexiones cotidianas desde un par de jeans y una mente inquieta.
Comments